Su antepasados inmediatos.
viernes, 25 de mayo de 2012
Un esforzado pionero de la agricultura y apicultura chilena: Patricio Larrain Gandarillas (1817-1902).
Fig. 1. Don Patricio Larrain en los años en que viaja a Europa como miembro de la primera Legación chilena en Inglaterra (Londres) hacia el año 1840. En dicho viaje, aprovecha para visitar además de Inglaterra, su destino final, Francia, España e Italia. Su interés se centra en conocer aspectos de las nuevas tecnologías agrarias y de la maquinaria agrícola de última generación. En Italia conoce por primera vez y admira el desarrollo de la apicultura, tema novedoso, desconocido en Chile, que le entusiasma de tal modo que se forja la idea fija de traer a Chile por barco a vela en un largo viaje de meses de duración, las primeras colmenas de la raza italiana de la abeja de miel, la Apis mellifera, especie por entonces desconocida en América del Sur. (Imagen tomada del libro: Los Pioneros, publicado en 1974 por la Editora nacional Gabriel aMistral.
Fig. 2. Don Patricio Larrain Gandarillas en su ancianidad. Suponemos que esta fotografía fue tomada probablemente hacia los años 1890-1893. En ese tiempo, Don Patricio tendría entre 73 y 76 años. Es precisamente la época en que finalmente logra dar término al notable túnel que regaría el valle de Mallarauco hasta entonces de secano. Aparece esta fotografía en la obra de Carlos Larrain de Castro : "La Familia Larrain, sus Orígenes en España e Historial de la rama mayor en Chile" Academia Chilena de la Hstoria, Editorial Universitaria, Santiago de Chile, (1982: 232).
Fig. 3. El Escudo familiar de los Larrain. Según el experto español en heráldica, Juan Carlos de Guerra, consultado por Carlos Larrain de Castro, este es el auténtico y más antiguo escudo familiar de cuya existencia hay antecedentes fidedignos que se remontan a fines del siglo XV ( año 1460). Se ha especulado sobre la existencia de otros escudos de esta familia, cuya autenticidad y antigüedad ha sido finalmente rechazada.
Antecedentes familiares.
José Patricio Larrain Gandarillas nació en Santiago de Chile y fue bautizado el 18 de Marzo de 1817 a pocos días de su nacimiento. Fueron sus padres don Juan Francisco Larrain y Rojas, (nieto directo del primer Larrain llegado a Chile, don Santiago Larrain y Vicuña) y doña Mercedes Gandarillas Aránguiz. Don Juan Francisco Larrain, su padre (1788-1836) fue uno de los miembros de la Primera Junta de Gobierno patriota en 1810. Sus antepasados navarros provenían del pueblo de Aranaz, (Aranatz en eúskaro) situado a escasos 6 kilómetros de la frontera con Francia, donde poseían una antigua casa solariega, la casa de Larrainenea, de la que existen antecedentes históricos fidedignos que se remontan al año 1500.
Breve reseña histórica.
La pequeña reseña histórica que sigue, ha sido fruto de la porfiada y constante solicitud expresada por mis dos hijos, Carlos Horacio y María Cristina Larrain Mardorf, para que les dejara en herencia recuerdos históricos bien fundados, sobre la vida, prosapia, e intensa e incansable actividad agrícola de éste, su tatarabuelo, don José Patricio.
¿Panegírico familiar o auténtico liderazgo agrícola?.
Como este Blog es esencialmente de corte eco-antropológico y no un panegírico destinado a enaltecer la familia y la prosapia, me resistía yo en un principio a apuntar aquí temáticas evidentemente asociadas tan íntimamente a mi propia familia. Ello me olía fuertemente a expresión de un vano orgullo familiar, intrascendente desde el punto de vista científico. Pronto, sin embargo, a medida que me iba enfrascando en la lectura de obras consagradas a este ilustre agricultor y propulsor de la agricultura chilena, me percaté no sólo de la importancia de la trayectoria del personaje en sí, sino también de su espíritu revolucionario y tremendamente innovador en materia agrícola. Y me di cuenta del enorme impulso que dio, como tal vez ningún otro en su época, al desarrollo de una agricultura tecnificada y a la apertura de nuevas y extensas superficies cultivadas para el campo chileno, entre los años 1840 y 1904, fecha de su muerte.
Ningún otro agricultor de su época aportó tanto en este campo y, probablemente, ningún otro le ha igualado después. Y este enfoque sí que nos pareció abiertamente eco-antropológico, en el sentido de que nos permitía atisbar en la capacidad de nuestro personaje para entender, captar y profundizar en el paisaje geográfico del campo chileno y sus potencialidades. Y entonces, bajo esta nueva luz, la actividad y existencia de don Patricio Larrain Gandarillas se nos aparecía bajo una nueva faceta: la del incesante buscador de la forma como potenciar los recursos existentes en el paía para el desarrollo humano.
Es verdad que como mayorazgo y primogénito (entre nueve hermanos) heredó una importante fortuna que comprendía las haciendas de Aculeo, Pelvín y valiosos inmuebles en Santiago. Pero tanto sus viajes a Europa en un par de ocasiones, como su temeraria empresa de regar el recién adquirido valle seco y estéril de Mallarauco, vecino a Pelvín, que le demandó tremendos sacrificios pecuniarios, lo dejaron varias veces al borde de la quiebra. No se amilanó, sin embargo con una confianza ilimitada en su buena estrella y en su Dios. Vamos a ir entrando en detalle en su azarosa, intranquila y movediza vida, a pesar de su salud más bien frágil y delicada.
Su antepasados inmediatos.
Su antepasados inmediatos.
Su padre don Juan Francisco, abrazó la causa patriota, teniendo entonces apenas 22 años de edad al producirse el movimiento de la Independencia. Así lo señala explícitamente en su obra don Carlos Larrain de Castro:
"Don Juan Francisco como casi todos los criollos de la época, era profundamente católico y es muy posible que todavía abrigara en su alma sentimientos monárquicos que después se atenuaron y desaparecieron. Por disciplina, aceptó sumiso el orden establecido y colaboró discretamente con la IV Junta [de Gobierno ordenada por José Miguel Carrera], la que quedó compuesta por José Antonio Pérez, don José Miguel Infante y don Agustín de Eyzaguirre." (Larrain de Castro, 1982: 210).
Don Juan Francisco aparece en efecto, nombrado por Carrera como uno de los doce regidores del Cabildo de Santiago en 1812. Señal obvia de que se sumó a la causa patriota. Esta aceptación del nuevo orden, le valió poco después terribles represalias por parte del general español Mariano Osorio, tras la reconquista en 1813. En efecto, la "Junta de Expurgación" creada por Osorio, exigió fuertes multas a los patriotas que habían colaborado con el régimen independentista o, al menos, simpatizado con éste. Se le impuso, en consecuencia una contribución forzada (considerada y denominada "un donativo") de $6.000 pesos a él y su madre doña Agustina de Rojas (Larrain de Castro, 1982: 211).
La vida durante la Patria Vieja. O´Higgins y los Larrain.
Tras la derrota final de las huestes realistas y la conquista de la isla de Chiloé, en 1924, todo el territorio chileno queda definitivamente liberado de la Madre Patria, España. Los años transcurridos entre Septiembre de 1817 y la batalla final de Maipú (1818) fueron duros para esta familia aristocrática terrateniente. No debieron mirar con muy buenos ojos estos hacendados chilenos de estirpe vasca (los Larrain) a don Bernardo O´Higgins y sus pretensiones, no solo por ser éste hijo de irlandés, sino por haber sido educado y formado en la Inglaterra anglicana. Además, se sabía o rumoreaba que era el hijo natural del Virrey don Ambrosio O´Higgins. Estos hechos, unidos a la circunstancia de que O´Higgins era considerado un advenedizo extranjerizante para la cerrada sociedad chilena de entonces, sin duda acercaron mucho más a los Larrain al bando político de los Carrera, enemigos acérrimos de O´Higgins. El golpe de gracia lo dio O´Higgins ya electo Director Supremo, cuando suprimió los títulos nobiliarios otorgados por España, prohibió el uso de los escudos de armas en las mansiones y suprimió la esclavitud.
Para los Larrain, descendientes directos de un Caballero de la Orden de Santiago, distinción obtenida por don Santiago Larrain y Vicuña en 1711 en la Corte española y dueños de un Marquesado por una rama lateral, estos cambios sociales bruscos, casi brutales, debieron parecer catastróficos. Pero el hecho de que los Larrain ya habían participado en el Primer Cabildo Abierto y asumido la causa patriota en la persona de don Juan Francisco Larrain y Rojas, padre de don Patricio, debió otorgarles unas cierta garantía de protección contra el encono de O´Higgins por la antigua casta dominante.
Más tarde, apaciguadas un tanto las aguas, don Patricio será llamado por el gobierno de José Joaquín Prieto en 1838 a formar parte de la comitiva oficial chilena a Europa, presidida por don José Manuel Borgoño. Esto sugiere ya la importancia de contar con su presencia en el nuevo gobierno criollo. Por entonces, O´Higgins vive exiliado en el Perú, en su hacienda de Montalbán, junto a Cañete en el sur del Perú donde muere lleno de nostalgia por su Chile querido Una de los principales objetivos de la misión Borgoño será firmar la paz definitiva de Chile con España y el restablecimiento de las relaciones diplomáticas con la Madre Patria. Patricio Larrain Gandarillas y Rafael Correa y Toro, fueron nombrados adictos a esta embajada extraordinaria a Europa con asiento en la Legación chilena en Londres.
El artículo sobre don Patricio Larrain G., de la obrita "Los Pioneros".
Muy pocos conocen esa pequeña publicación editada en Agosto del año 1974 titulada "Los pioneros". Su objetivo fue destacar las figuras de aquellos prohombres del pasado republicano chileno que se destacaron, en diversa forma, por su actividad económica, "abriendo surcos fecundos en nuestra patria", como señala la Presentación de la obra. Es cierto que la libertad económica de la época permitió a muchos chilenos desarrollar su iniciativa y empuje sin las trabas burocráticas y reglamentarias existentes el día de hoy.
El libro resume las vidas azarosas y laboriosas de José Tomás Urmeneta, "el Rey del Cobre", José Menéndez, hijo de humildes asturianos, que llegará a ser "el amo de la Patagonia", José Santos Ossa, "el Vencedor del Desierto", Ramón Subercaseaux, hijo del francés Francois Subercaseaux Bréton, avecindado en la ciudad de Copiapó, diplomático, pintor e industrial, José Besa, "comerciante de gran estilo", creador de la Refinerías de Azúcar de Viña del Mar, Matías Cousiño, quien se inicia humildemente en el mineral de plata de Chañarcillo y será el gran pionero de la explotación de las minas de carbón de Lota. Junto a estos nombres ilustres, el pequeño libro recoge el nombre de Patricio Larrain Gandarillas, como "Un agricultor del siglo XIX".
Presentamos aquí, copiado página tras página,este pequeño artículo dedicado a nuestro bisabuelo paterno. Su texto rezuma energía, tesón, dedicación, y visión de futuro, virtudes propias de los grandes hombres que, independientemente de su origen o cuna, lograron forjarse un destino venturoso, pensando mucho más en su propio país que en su ventura y provecho personal.
He aquí el texto del trabajo dedicado a don Patricio:
Epílogo y moraleja para sus descendientes.
El historiador romano Salustio [Gaius Sallustius Crispus] en el siglo I a.C., acuñó una célebre frase, que bien puede compendiar este homenaje a nuestro ilustre antepasado. Le hemos querido destacar aquí no por ser nuestro antepasado (hemos tenido decenas de ellos por vía paterna y materna), sino por ser lo que el fue y por habernos legado lo mucho que nos legó. Decía sabiamente Salustio:
Maiorumque gloria, posteris quasi lumen est",
lo que en buen romance castellano viene a significar:
"PARA LOS DESCENDIENTES, LA GLORIA DE SUS MAYORES CONSTITUYE UNA ESPECIE DE LUZ".
¡Qué cierto es esto!. ¡ Cómo quisiéramos, con este breve esbozo acerca de nuestro ancestro común, animar a nuestros hijos y nietos, hermanos y sobrinos en diverso grado a emular el espíritu, la energía y la tenacidad de nuestro notable antepasado!. ¡Qué falta hace hoy entre los descendientes de aquellos aguerridos navarros que partieron a las Indias a fines del siglo XVII, abandonando su casa solariega paterna, su Larrainenea natal en Aranatz, despreciando su primogenitura- cual fue el caso de don Santiago de Larrain y Vicuña -, para embarcarse en la gran aventura americana, cual otros Cortés, Pizarro o Valdivia, este espíritu de gigante, esta visión de futuro, esta capacidad de adaptación a todas las circunstancias, incluso las peores.! Algo de este espíritu de gigante batallador que no ceja ante las adversidades, es lo que podemos apreciar a través de la lectura de estos textos escritos hace 38 años por un autor desconocido.
Ojalá una pizca de este espíritu de emprendimiento, de profundo y sentido amor patrio y férreo espíritu de familia pueda todavía flamear entre sus descendientes, nuestros hijos, sobrinos y nietos por cuyas venas, querámoslo o no, corre sangre navarra y castellana, gallega y hasta andaluza, tal vez. Pero la navarra vascongada, sin duda (la de los Larrain, los Alcalde, los Errázuriz, los Cotapos y tantos otros más hacia atrás) es a lo que nos parece, la más potente y avasalladora. Nuestros apellidos, nuestro modo de ser y aún nuestras facciones, así parecerían delatarlo.
Nos proponemos en un próximo artículo, si Dios quiere, destacar los nexos familiares más antiguos de los Larrain desde su Navarra natal, así como trazar un árbol genealógico completo, generación tras generación, por la vía paterna (Larrain), desde los remotos orígenes que se pueden pesquisar, según algunos, hasta la época de las Cruzadas. De ello, Dios mediante, hablaremos mas tarde.
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1 comentario:
Un canal de TV de japon desea tener imagen(foto)del don Patricio Larrain para presentar dentro de un programa.Le ruego que contacte con Akie Wada(akie318@gmail.com).Saludos cordiales.
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